OPINIÓN.- Difícil es no acordarse de lo que hace 12 años sucedió tal día como hoy, en aquella mañana del 11 de marzo de 2004 en el que vivimos un episodio digno de ser olvidado pero que es necesario que siempre sea recordado. Pero en Trenvista no vamos a volver a contar la historia, que conocerás al dedillo, ni vamos a volver a posicionarnos en contra del deleznable uso de las fotografías de los trenes. El artículo de este año, que pasará a engrosar la lista de los realizados sobre el 11-M hasta la fecha, está dedicado a los otros héroes; a los ferroviarios.
Detrás de los trenes hay personas
Si hay algo que no se habla acerca del 11-M es del personal ferroviario. Vale que quizás pocos de ellos salvaron vidas tras el atentado, vale que quizás no muchos fueran víctimas directas (y uso quizás porque no se sabe). Pero no dejan de ser unos héroes que mostraron un nivel profesional sin precedentes, gestionaron la crisis de manera excepcional y causaron que todo fuera mejor de lo que podía haber sido. Personas de carne y hueso como tú o como yo que se sobrepusieron al shock, a las pérdidas y al miedo para conseguir que todo regresara a la normalidad lo antes posible.
Y es que no me quiero imaginar lo duro que tuvo que ser conducir un tren de Cercanías o trabajar en las taquillas o como personal de seguridad en Madrid inmediatamente después del atentado. Ir todos los días a trabajar con el miedo de que no volver a ver a los tuyos por estar haciendo tu labor viviendo, además, de cerca la tragedia reciente.
Algo que me parece lamentable es que por lo general nadie se acuerde de que los trenes no son seres inteligentes que funcionan solos. Que nadie se acuerde de todo el personal que, aunque no se vea, hace posible que ese tren esté en la vía y llegue a su destino en perfectas condiciones. Algo de lo que todos somos cómplices. Y si hablo en primera persona es porque en este medio hemos hablado antes sobre los trenes del 11-M que de las personas, que son lo que más importa.
Lamentablemente, no hemos podido profundizar en esta materia ni hablar con nadie del personal ferroviario afectado por los atentados terroristas para trasladar al mundo lo que nunca se ha dicho acerca de este histórico suceso. Sin embargo, como persona, ciudadano y Director de Trenvista no puedo dejaros de dar las gracias por vuestra forma de actuar y por todos los actos heroicos que a día de hoy aún no han sido desvelados.
La tragedia del 11-M es más grande de lo que cuentan
Olvidar mencionar al personal ferroviario no es la única información sesgada acerca de lo que supusieron estas bombas. Como suelen hacer, los medios de comunicación se han limitado a morbosear con unas imágenes que deberían estar moralmente prohibidas, a hablar más de números que de nombres y apellidos e incluso a utilizar el suceso como arma política. Se olvidan que hay más víctimas que los fallecidos y se olvidan del trasfondo que originó que semejante tragedia tuviera lugar.
No es misión de este medio profundizar en esta materia. Pero sí hago un llamamiento a que, como lector de este pequeño artículo de opinión, veas más allá de lo que se cuenta, veas más allá de lo que se quiere que se vea y no dejes de tener en cuenta a todas las personas que resultaron afectadas por este atentado terrorista a lo largo y ancho del mundo.
Vino no hace mucho un compañero maquinista en cabina de mi tren en Valencia y al final del viaje me enteré de que fue uno de los que conducían los trenes de los atentados. No le quise preguntar nada. Sólo le pregunte que si después de estos años había conseguido dejarlo atrás. Me miró y no me contesto con palabras, pero su gesto y su mirada fueron elocuentes
Creo que como en otras situaciones ,lo profesionales del ferrocarril solo estamos en boca de los ciudadanos para ser desacreditado .
Como bien dices hubo otros muchos afectados que fueron los ferroviarios y personal auxiliar.
Quien puede olvidar que las primeras personas que acudieron fueron precisamente los ferroviarios , ellos fueron los primeros en auxiliar y por tanto fueron los primeros que se enfrentaron a la masacre.Sin olvidar que dentro de los trenes viajaban compañeros que se desplazaban a sus puestos de trabajo y que ayudaron a que muchos de los que hoy están con vida , pudieran ser atendidos rápidamente.
Pero que vamos a hacer ya estamos acostumbrados a que solo se acuerden de nosotros para censurarnos y no para ver nuestro bien hacer día a día.
Mi profundo agradecimiento a esos compañeros que se olvidaron de su propia seguridad y acudieron rápidamente a socorrer en lo que estaba en sus manos.
Efectivamente, sólo se habla de vosotros para culparos de los accidentes, de las huelgas o de lo que sea. Es muy triste esta realidad.