OPINIÓN.- No es práctica habitual de Trenvista publicar un artículo de opinión un miércoles. Sin embargo, como Director de este medio de comunicación que defiende al ferrocarril, no puedo dejar pasar un minuto más para expresar las más sinceras conclusiones tras haber asistido al estreno de la película documental Frankenstein 04155. Parte de la sección DOC España del SEMINCI, da a conocer la verdad sobre el accidente de Angrois, producido en la curva de A Grandeira en julio de 2013.
Esto es vergonzoso
Lo primero que, como ciudadano español, aficionado al ferrocarril y profesional de la comunicación me avergüenza es que, según Aitor Rei (director de la cinta), ningún cargo de Renfe, Adif o el Ministerio de Fomento así como los responsables de turno cuando se inauguró la línea, quisiera prestar declaración en Frankensein 04155 a pesar de haber sido invitados. A mi juicio, sólo cabe aplicar el refrán ‘quien calla otorga’. Y es innegable que es un insulto a las víctimas y ciudadanos el hecho de que admitan la realidad acudiendo al refranero español.
Más insultante resulta aún el demostrado trato a las víctimas por parte de los responsables del Estado español. No ya sólo por las comisiones de investigación negadas en sede parlamentaria tanto en Galicia como en el Congreso de los Diputados. No ya sólo porque la Fiscalía haya defendido más a Renfe, Adif y a los políticos de turno que a las víctimas. No ya sólo porque, una vez más, las autoridades que viven de los impuestos se rían de nosotros como otras tantas veces. En esta línea, no hay que ovidar algo que han recalcado bien en Frankenstein 04155 y es el hecho de que ha habido tres grandes casos recientes en los que nuestros gobernantes han hecho lo posible por que no se sepa la verdad:
- Accidente de Spanair (2008). 154 muertos y 18 heridos.
- Accidente del metro de Valencia (2006). 43 muertos y 47 heridos.
- Accidente del Yak 42 (2003). 75 muertos.
Simplemente por no asumir las responsabilidades que cualquier cargo público (y privado) debe asumir al aceptar su puesto de trabajo. Pero lo más insultante es que las víctimas se hayan sentido tratadas como terroristas o maleantes en diversas ocasiones. Una de ellas, como queda patente en Frankenstein 04155, fue durante el acto de cinismo convocado justo un año después del accidente por el presidente del Gobierno Gallego, Alberto Núñez Feijóo, en el que pretendía darle una medalla a las víctimas del accidente de Angrois y los antidisturbios los esperaban en la polémica Ciudad de la Cultura de Galicia cuando estos acudieron a defender por qué no aceptaban dicha medalla y querían exigir que se dijera la verdad.
Frankenstein 04155 es mucho más que un documental
Bajo este título, que hace referencia al apodo que los ferroviarios dan a la serie 730 y al número del tren Alvia accidentado, se esconde una denuncia sobre el funcionamiento del Estado español, en el que los intereses políticos priman por encima de cualquier otro criterio, incluso el de la propia vida.
Y es que tanto en la LAV (Línea de Alta Velocidad) Orense-Santiago como en la concepción de la propia serie 730 se han cometido un sinfín de chapuzas irregularidades que, junto al despiste del maquinista, son las responsables de que en la curva de A Grandeira se produjera el ya tan sonado accidente de Angrois.
Hay que recordar que en este terrible suceso 81 personas perdieron la vida. 81 padres, hijos, hermanos, parejas, tíos, nietos como tú o como yo que por culpa de una cadena de irresponsabilidades ya no pueden vivir. Además, 131 personas resultaron heridas y sus vidas quedaron perturbadas para siempre, en especial tras el trato recibido.
Las explicaciones que nos faltan
Ante la humillante denuncia realizada Frankensein 04155, creo que ya es hora de que las autoridades y empresas competentes den las explicaciones pertinentes.
- Ministerio de Fomento (tanto cargos actuales como pasados), por modificar el proyecto constructivo meses antes de la inauguración antes de las elecciones y no supervisar el trabajo de sus empresas.
- Renfe y Adif por permitir la circulación de un tren que no había sido homologado tras su reforma y no hacer caso al informe que exigía el uso del ERTMS en la LAV Orense-Santiago.
- Renfe por no hacer caso a las recomendaciones de Bombardier que hacían de parche a las incompatibilidades del ETCS con las eurobalizas y solicitar su desactivación sin hacer un análisis de riesgos.
- Talgo para aclarar si realmente el furgón generador, que fue el que hizo descarrilar el tren, excede el peso indicado en las condiciones técnicas.
Y es que, mientras nadie diga lo contrario, mientras quienes tomaron las decisiones incorrectas manipulen la justicia a su favor, haciendo recaer toda la responsabilidad sobre el maquinista, todo lo dicho en Frankenstein 04155 es verdad.
MUCHAS GRACIAS POR SU ARTICULO
Con las medidas de seguridad adecuadas da igual el ancho de vía o incluso que la curva fuera demasiado cerrada. Daba igual que el ERTMS llegara hasta la propia estación de Santiago si el tren lo llevaba desconectado. Es más, solo con llevarlo el tren conectado y funcionando ya se hubiera evitado la tragedia, ya que 4 kilómetros antes del lugar del accidente se produce la transición entre ERTMS y ASFA, transición para la que en teoria hay que reducir la velocidad y en la que además el maquinista ha de dar el “visto bueno” a ese cambio de sistema de seguridad, lo que hubiera reducido aún más la posibilidad de accidente ya que ese punto de transición ya sería un punto de referencia para el maquinista y se hubiera eliminado el factor despiste.
Pues bien, una vez deciden que hay que desconectar el ERTMS del 730 (hay que recordar que los 121 que pasaban por la LAV no tenían problemas) tenían que reevaluar los riesgos, cosa que o no hicieron o lo hicieron mal, ya que estaba claro que no iba a ser una situación puntual, si no que esa desconexión iba a ser durante una duración indefinida. Es más, sabiendo que era una situación extraordinaria lo suyo hubiera sido una baliza de LTV, aunque no se ajuste perfectamente a la norma. Solo después del accidente se dieron cuenta del riesgo que implican las reducciones bruscas de velocidad, y oh, vaya, modificaron la norma y pusieron balizas en esos puntos de riesgo potencial. Hablan de prisas políticas por inaugurar, de recortes y demás… cuando la solución es una simple baliza que se coloca en unos minutos con una modificación de la norma es tontería hablar de prisas, de modificaciones… repito, hablamos de que darle protección a esa curva son unos minutos y unos euros.
Hay más cosas, ¿por qué no se les hizo caso a las quejas de los maquinistas? ¿Por qué aquel famoso mail del jefe de maquinistas acabó en nada? ¿Por qué no se evaluaron mejor los riesgos una vez el ERTMS de los 730 fue desactivado? Básicamente porque según la norma todo era legal, así de triste y vergonzoso, no se hizo nada porque las medidas de seguridad contempladas eran las correctas según la norma. Lo dicho, triste y vergonzoso. Y más triste aún al saber lo fácil que habría sido evitar el accidente. En una LAV que se hace en varios años y donde se han gastado miles de millones hacer segura esa curva eran 800€ y 15 minutos. Pero como según la norma todo era seguro y estaba bien hecho pues no se hizo nada. Y ojo, que esto implica que judicialmente todos menos el maquinista se hayan ido de rositas… pero ni una dimisión, ni un despido ni nada de nada es una falta de respeto total y absoluta a las víctimas.