- Es el segundo año consecutivo en el que las tarifas reguladas se congelan.
- Para el 2015 se han anunciado una serie de medidas complementarias que buscan mejorar la posición del ferrocarril británico.
- Estas medidas se toman para aliviar al usuario, que actualmente sufre las consecuencias de la privatización.
El Gobierno Británico anuncia que las tarifas ferroviarias reguladas se mantendrán congeladas en 2015 (como ya hicieran este año) y las no reguladas no podrán subir por encima de la tasa de inflación.
Tarifas congeladas para aliviar al usuario
Como ya hemos dicho en otras ocasiones, la red ferroviaria británica no está atravesando su mejor momento. Al margen del complicado sistema de franquicias y de los problemas en la solvencia de algunas de ellas, lo que preocupa a los ciudadanos es el precio de los billetes, que en los últimos años había ido aumentando.
El viajero que usa el ferrocarril británico ha visto en los últimos años cómo los precios de los servicios pueden aumentar de manera considerable en algunos casos (algunos servicios podían llegar a una subida del 5,5%), lo que a muchos les ha llevado a buscar medios de transporte más económicos.
Como medida para “ayudar a las familias trabajadoras” el pasado año se tomó la decisión de congelar las tarifas ferroviarias reguladas por el Estado y este año se ha decidido prolongar esta medida para aplicarla en 2015. Además, se ha anunciado que el año próximo las empresas privadas no podrán aumentar las tarifas no reguladas más allá del 2,5%.
Otras medidas de mejora en Reino Unido
Desde el Gobierno Británico han aprovechado para recordar que las tarifas que los usuarios pagan sirven para financiar un programa de mejoras que les repercutirá directamente a ellos. En este sentido ha anunciado una ayuda de 16.000 millones de libras para la industria ferroviaria en el periodo 2014-2019, que servirá para mejorar la capacidad y la calidad de la red.
Fuente: Gobierno Británico.