- Renfe da una vuelta a su estrategia comercial para llevar su servicio estrella a todo el país.
- El cambio de marca tendrá lugar el 1 de enero, con el inicio del nuevo año.
- De esta manera, ciudades como Santander, Gijón o Cieza contarán con trenes AVE en pocos días.
En menos de un año la alta velocidad española tendrá un nuevo operador. Y se nota que Renfe está inquieta ante este panorama, al que va a intentar adaptarse de antemano lanzando el TAV de bajo coste AVLO. Si bien este servicio es un viejo conocido (en su día se presentó con el nombre de Eva), el último movimiento de la empresa nos ha pillado por sorpresa. Con el objetivo de llevar la alta velocidad a toda España, desde el 1 de enero los trenes Alvia serán comercializados como AVE.
Llevar la alta velocidad a toda España invirtiendo muy poco
En la nota de prensa difundida por Renfe hoy a primera hora reconocen la dificultad de expandir el servicio AVE. El motivo es bien sabido por todos, el hecho de que la red de alta velocidad tenga un ancho de vía distinto al ibérico.
En otros países como Francia es habitual que los TGV circulen por todo el territorio usando las vías convencionales, algo por ahora imposible en España.
Con la compra de los trenes Avril, que contará con unidades de ancho variable, Renfe pretendía llevar el AVE a ciudades sin infraestructura de alta velocidad. Pero el departamento comercial se ha dado cuenta de que no es necesario esperar a que estos trenes funcionen. Con los actuales Alvia, que circulan por todos los tipos de vía, es posible lograr lo imposible. Que en unos días el AVE llegue a Galicia, Murcia, Asturias, Cantabria y País Vasco. Aunque sea a una velocidad máxima de 250 km/h.
“Según la UIC, un tren de alta velocidad es aquel que circula a 250 km/h. Es lógico que Renfe use su marca estrella de alta velocidad en los trenes que la alcanzan”, ha reconocido esta mañana a Trenvista un portavoz de la empresa. “Es importante que la sociedad disfrute de un tren que, como todos sabemos, goza de buen prestigio. Aparte de atraer a nuevos viajeros, buscamos que el cambio fortalezca a Renfe frente a los nuevos competidores”.
Sobre la pregunta de que esta sea una maniobra propagandística para decir que el Gobierno lleva el AVE a muchas ciudades, el portavoz se ha limitado a responder que estos días se está muy bien en la playa.
Todo era una cuestión de vinilos
Que ciudades como Burgos, Irún, Cartagena, Santander o Gijón disfruten del AVE parecía una cuestión de grandes y costosas obras. Sin embargo, tras darle muchas vueltas, Renfe se ha dado cuenta de que era tan fácil como cambiarle los vinilos a unos trenes que ya prestan servicio.
Inicialmente se planteó hacer una transición gradual, empezando por el Alvia Madrid-Murcia con un viaje inaugural con el Presidente del Gobierno en funciones. Pero ante el temor a que el tiempo de viaje le hiciera preferir inaugurarlo en el Falcon, decidieron hacer el cambio de una sola vez, aprovechando el cambio de año.
Eso sí, Extremadura tendrá que seguir esperando.