La ministra de Cohesión Territorial del gobierno portugués, Ana Abrunhosa, ha anunciado que Portugal reabrirá la línea del Duero hasta Barca de Alba desde Pocinho. Y manifestado la intención de que la reapertura llegue hasta Salamanca para unir Oporto y la ciudad española por ferrocarril.
El tramo de 28 kilómetros que separa Pocinho de Barca de Alba, en la frontera con España, fueron cerrados en 1988. Tres años después de que España cerrara el 1 de enero de 1985 su tramo internacional desde Fuente de San Esteban.
De esta manera el Gobierno de Portugal toma el testigo de una propuesta aprobada por unanimidad en la Asamblea de la República pidiendo la reapertura de este ferrocarril. Una propuesta que llegó al parlamento portugués de la mano de la Liga dos Amigos do Douro Património Mundial, que pedía la modernización de la línea del Duero entre Ermenesinde y Pocinho y la reapertura hasta la frontera.
La línea del Duero hasta Barca de Alba será una realidad. ¿Y hasta Salamanca?
Abrunhosa no ha limitado la reapertura al territorio portugués. Durante el anuncio realizado en la ceremonia de celebración de los 20 años de la denominación como Patrimonio Mundial de la Región vitícola del Alto Duero, mencionó la necesidad de convencer a los “hermanos del otro lado” de la importancia de que la reapertura llegue hasta Salamanca.
Una línea de 77 kilómetros cuyo último tramo entre La Fregeneda y Vega de Terrón es ahora una vía verde. Pero que mantiene la vía y todos los elementos ferroviarios ante una posible reapertura.
Sin embargo por parte del Gobierno de España no se ha planteado el regreso de este ferrocarril internacional que permitiría unir dos ciudades Patrimonio de la Humanidad atravesando una zona de alto valor turístico.
La Ministra terminó el anuncio admitiendo que este “puede no ser un trabajo fácil”. Pero recuerda que proyectos complicados como la navegabilidad del Duero son ahora una realidad.
El mayor escollo para la reapertura es que la Línea desde el año 2000 se ha declarado BIC en calidad de Monumento.