El consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha anunciado esta mañana que el tramo Argüelles-Avenida de América de la línea 4 del metro de Madrid reabrirá el próximo viernes 6 de marzo.
El resto de la línea (el tramo Avenida de América-Pinar de Chamartín) tendrá que esperar 4 días más, hasta el lunes 10 de marzo. Culminarán así unas obras que buscan aumentar la fiabilidad y la capacidad de la línea.
Catenaria rígida y un nuevo sistema de señalización
El cambio más visible que está experimentando la línea es la sustitución del hilo tranviario (entre San Bernardo y Esperanza) y la catenaria flexible (entre Esperanza y Mar de Cristal) por la catenaria rígida que poco a poco va llegando a todas las líneas.
De hecho, la línea 4 era la única que mantenía en servicio el hilo tranviario en un tramo largo. Desde el cierre para iniciar las obras el 13 de enero, este sistema para transmitir la electricidad a los trenes sólo se mantiene de manera anecdótica en la estación Aeropuerto T4.
El cambio a catenaria rígida permitirá reducir los costes de mantenimiento y aumentar la fiabilidad de la explotación, ya que tiende a dar menos problemas que los sistemas clásicos.
Señalización homogénea
Hasta el cierre, el tramo San Bernardo-San Lorenzo tenía instalado un sistema ATP con códigos de velocidad. Usando enclavamientos y otros subsistemas de distintas épocas, algunos de ellos con más de 30 años de servicio.
El resto de la línea tenía instalado el sistema ATP con distancia objetivo, más moderno y eficiente que el de códigos de velocidad. Aparte de permitir más trenes circulando, gestiona mejor cualquier incidencia que pudiera derivar en la necesidad de una conducción manual.
El cambio de la señalización está afectando a más de 10 kilómetros de túnel, 17 estaciones y a toda la flota de la serie 3000 asignada a la línea. Además, según Metro de Madrid, también se van a adaptar trenes de la serie 2000 lo que podría ser una señal de su regreso a la línea 4.
Reforma de estaciones
Por último, Metro de Madrid ha aprovechado el cierre para reformar algunas estaciones. En concreto, está haciendo una renovación integral de Esperanza, Arturo Soria, Alfonso XIII y Prosperidad, que hasta el mes de enero mantenían el mármol con el que fueron abiertas al público.
Sobre la mejora de la accesibilidad, será una tarea que continuará pendiente pero que Metro tiene previsto abordar en los próximos años.
Obras realizadas fuera del verano por un litigio judicial
La previsión original era que todas las obras se ejecutaran durante el verano de 2019. Sin embargo, una disputa judicial iniciada por la UTE que perdió el concurso hizo que se tuviera que posponer el inicio de las obras hasta que se resolviera el caso.
Pero la UTE ganadora (Cobra, Instalaciones Semi, Cymi y Electren) recurrió la decisión de paralizar los trabajos y el 20 de noviembre un tribunal resolvió a su favor. Pudiendo iniciar la reforma tan pronto como fuera posible.
Sin embargo, la decisión de cortar el servicio de una línea en la que viajan una media de 3,6 millones de personas al mes ha causado mucha controversia y molestia entre las personas afectadas.
A pesar de que se ha puesto un autobús sustitutivo, los viajeros se quejan de que sólo funciona entre Pinar de Chamartín y Avenida de América. Y de que es un servicio lento debido a las limitaciones del tráfico rodado.
Fuentes: Europa Press, Metro de Madrid y ABC.