La alemana DB ha revelado su ambicioso plan de acción para ganar cuota de mercado en la Larga Distancia, un servicio que para el ferrocarril genera pérdidas desde que en 2013 se liberalizase el sector de los autobuses interurbanos.
La estrategia de DB
La esencia de este plan de DB es tener más trenes y conexiones más rápidas, para lo que la empresa alemana va a invertir 12.000 millones de euros hasta el año 2030. Una de las piezas claves será la entrega de los 130 trenes ICx que entrarán en servicio a finales de 2017, aumentando un 25% la oferta y pudiendo atraer a hasta 50 millones más de pasajeros al año.
La mejora de los servicios se concentrará sobre todo en las poblaciones de más de 100.000 habitantes, que son uno de los públicos que más ha caído, pasando al transporte por carretera.
Ademas, DB también realizará cambios en su política comercial, como el lanzamiento de una abono trimestral, el establecimiento de la reserva de asientos en todas las clases y otras medidas que flexibilizan el servicio. Además, como viene anunciándose en otros países, los trenes ICE e IC contarán con WiFi gratuito.
Fuente: Railway Gazette.