- Las nuevas normas se aplican a todas las formas de comunicación, incluyendo las redes sociales.
- CP avisa de que el incumplimiento del reglamento podría acarrear medidas disciplinarias, civiles o penales.
- Los sindicatos se quejan de que el documento vulnera derechos constitucionales.
La compañía portuguesa CP ha creado un nuevo reglamento de comunicación que, entre otras cosas, prohíbe a sus empleados hablar con la prensa. Desde el día 3 de septiembre, todos deben remitir al portavoz de la empresa para “proteger la imagen de CP”.
CP manda callar a sus empleados
El nuevo reglamento de comunicación de CP, firmado por el presidente y la vicepresidenta, afirma que el objetivo de la empresa es “proteger su reputación, buen nombre, la identidad y la actividad comercial” y por lo tanto debe “luchar por la coherencia a través del Grupo CP, en perfecta alineación con la estrategia y los objetivos definidos por la dirección”.
En este sentido, sus trabajadores ya no pueden hablar de la empresa con ningún periodista, para no perjudicar a CP.
Por si fuera poco, también en otros actos de carácter profesional, los trabajadores ven limitada su libertad. Si, por ejemplo, un ingeniero fuese invitado a una conferencia a título personal, debe “ser prudente a la hora de realizar comentarios sobre la compañía”.
Incluso hay un apartado para los estudios e investigaciones científicas en el nuevo reglamento de comunicación. A la hora de realizar cualquier tipo de trabajo académico, el empleado de CP debe “solicitar formalmente el permiso a la Compañía, indicando claramente el propósito, la divulgación esperada y los eventuales beneficios que pueda obtener de la empresa, el trabajador o el sector”.
Los sindicatos, contra el nuevo reglamento de comunicación
El Comité de Trabajadores de CP dice que “la imagen de la CP debe ser defendida por las buenas prácticas de la empresa y por el escrupuloso cumplimiento de la ley“, no mediante un reglamento de comunicación prohibitivo.
El propio Comité de Trabajadores y los sindicatos dicen que el nuevo reglamento viola la Constitución y vulnera la libertad de expresión y opinión.
La creación de este nuevo documento probablemente guarde relación con las filtraciones sobre la seguridad de la línea de CP de Cascais.
Hace un mes, el director general de Fernave (empresa de formación y consultoría de CP) fue despedido una semana después de dar una entrevista al Diario Económico por presunto “abuso de confianza”.
Fuente: Público.pt
