En el día de ayer la circulación de trenes entre Bruselas y la localidad belga de Namur se ha visto afectada durante varias horas por el descubrimiento de hoy por el hallazgo de entre 6 y 8 bombas de la II Guerra Mundial que contenían sustancias químicas en los alrededores de la estación de Ottignies, en el centro del país.
Las autoridades se han visto obligados a cerrar la circulación ferroviaria de la estación, evacuarla y establecer un perímetro de seguridad. Finalmente la SEDEE, grupo militar dedicado a la desactivación de explosivos, se ha encargado de neutralizar la zona.
Según informan La Vanguardia y La Libre.be, todo esto ha causado la suspensión de 40 trenes que circulaban por la zona, aunque los viajeros han tenido a su disposición unos autobuses alternativos.