El pasado viernes 4 de noviembre han comenzado las pruebas con trenes de tracción eléctrica de Renfe por la Variante de Pajares. Así lo ha anunciado la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez; durante uno de los viajes de prueba realizados esta mañana.
Acompañada por los presidentes del Principado de Asturias, Adrián Barbón; y la delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa; la presidenta de Adif y Adif AV, María Luisa Domínguez, y el director general de
Operaciones de Renfe, José Luis Cachafeiro; Sánchez ha hecho un viaje entre el PAET de La Robla y Campomanes a bordo de un tren de la serie 730.
Una vez finalizado el viaje, ha puesto en valor unas obras en las que ya se han invertido 3.800 millones de euros durante los 18 trabajos que han tomado.
Durante su discurso ha mencionado que la puesta en marcha de esta infraestructura va a permitir reducir el tiempo de viaje entre Madrid y Asturias en más de 100 minutos. Con lo que el viaje entre la capital y Oviedo se quedará en 2 horas y 43 minutos. Y entre Madrid y Gijón se quedaría en 3 horas y 14 minutos.
Unos tiempos de viaje que se reducirán, en al menos 15 minutos más, cuando entren en servicio los trenes de alta velocidad y ancho variable capaces de circular a 300 km/h. Trenes que serán necesarios para aprovechar las prestaciones de la infraestructuras, ya que entre Camponames y Gijón circularán por la red convencional en ancho ibérico.
Las pruebas con tracción eléctrica de la Variante de Pajares se realizan junto a las del sistema ERTMS
La puesta en tensión de la catenaria tuvo lugar el pasado 20 de septiembre. Un hito que ha permitido iniciar las pruebas con tracción eléctrica de la Variante de Pajares con trenes comerciales. Una fase en la que también se está probando el buen funcionamiento del ERTMS.
Aunque en ambos extremos de esta infraestructura la tensión de alimentación sea de 3.000 V CC, en la mayor parte es de 2×25 kV 50 Hz CA para aprovechar al máximo las capacidades del material móvil.
La variante tiene una longitud de 50 kilómetros, de los cuales 41 km discurren en túnel y 1,8 km en viaductos. Entre estos elementos destaca el túnel base, una infraestructura formada por un doble tubo con una longitud de 25 km. Es el sexto túnel más largo de Europa y el séptimo del mundo. Y fue el protagonista de, entre otros problemas, las sonadas inundaciones.
El futuro de la Rampa de Pajares sigue estando en el aire
La nueva infraestructura será mixta, permitiendo la circulación de trenes de mercancías y de alta velocidad. Precisamente, para dar tracción por este trazado, Renfe decidió comprar las locomotoras de la serie 256; las únicas bitensión de mercancías junto a las 252.
Su puesta en marcha permitirá ahorrar 37 kilómetros frente a la actual Rampa de Pajares. Además, aumentará la fiabilidad del servicio y mejorará notablemente la capacidad y los tiempos de viaje, ya que la rampa posee un perfil complejo con grandes pendientes y curvas cerradas. Además, está más expuesta que la variante a las inclemencias del tiempo.
El futuro de la rampa de Pajares está en el aire. Si bien, los planes iniciales era clausurarla una vez entrara en servicio la variante, la última información facilitada por el Gobierno es que evaluará su futuro una vez este hito se produzca.
Varias plataformas defienden el mantenimiento de la infraestructura clásica como alternativa a posibles interrupciones del nuevo trazado, para mantener los trenes de Media distancia que unen los municipios de la rampa con León y Gijón y para mantener su uso como vía de pruebas.
