- SNCF busca hueco en el mercado español mientras Francia se resiste a liberalizar su red.
- Las empresas van tomando posiciones ante la inminente liberalización.
- Aunque SNCF podría operar en España por su cuenta, Renfe sólo podrá hacerlo en Francia mediante su entidad conjunta.
El operador ferroviario público francés SNCF se ha convertido en el primer grupo extranjero en obtener la licencia de operador de viajeros por ferrocarril en la red de Adif, así como el certificado de seguridad, requisitos indispensables para participar en el sector una vez se haya liberalizado.
SNCF se posiciona como firme competencia en la alta velocidad española
Al igual que muchas otras empresas españolas, la francesa SNCF quiere competir con Renfe en los servicios de transporte de viajeros. Es más, es bien conocidas sus intenciones de operar la ruta Madrid-Barcelona con sus trenes TGV Eurodpúplex.
Estas intenciones están más cerca de convertise en un hecho, ya que Adif le ha otorgado la licencia para operar trenes de viajeros. Ahora que ya ha conseguido el certificado de seguridad (como antes lo hicieran Alsa, Comsa, Continental Rail, Acciona Rail Services, Eco Rail o Interbus entre otras), queda a la espera de que finalmente se abra la puja entre todas las operadoras hasta que una de ellas consiga el título habilitante que la hará ser la competencia de Renfe.
En este sentido, SNCF tiene varios puntos a su favor, ya que opera servicios conjuntos con Renfe, se encarga del mercado francés y además cuenta con sus trenes de alta velocidad TGV de dos pisos (obra de Alstom) que pueden transportar a hasta 560 pasajeros, aumentando así el margen de beneficio.
Aprovechando un escenario que se niegan a aceptar en su país
Resulta curiosa la posición de SNCF aprovechando la liberalización del mercado español cuando Francia, país en el que SNCF es la operadora pública, se niega a aceptar la liberalización generalizada que la Unión Europea ha decidido.
Aunque la fecha límite es en 2019, algunos países como Italia ya permiten que las empresas privadas operan en la red, mientras que en Reino Unido el sistema es totalmente privado. Otros, como la propia Francia se resisten y Alemania sólo piensa en autorizar operadoras privadas para servicios concesionados.
Fuentes: Adif y ABC.