Renfe Mercancías ha dejado de operar trenes en ancho internacional desde España, cediendo su último servicio a Transfesa, filial de DB Cargo.
Este tren, contratado por Kombiverkehr y que conecta Barcelona con Ludwigshafen (Alemania), era el único que el operador público retenía, después que tanto Transfesa como Captrain le hayan arrebatado todos los contratos.
Desde LFP confirman a Trenvista que la última circulación de este tren con tracción de Renfe fue el 31 de diciembre. De esta manera, el único tren regular remolcado con locomotoras de la serie 252 es el Intercity Valencia-Alicante.
A la competencia se le suman rutas internacionales que han desaparecido, como el tren a Duisburgo y las circulaciones a Busto, Italia. Este cambio ocurre mientras Renfe espera recibir nuevas locomotoras Euro6000 de ancho estándar con el objetivo de impulsar (o ahora recuperar) los tráficos transfronterizos hacia Francia.
Por su parte, Transfesa consolida su posición en el mercado de ancho internacional, operando ahora dos servicios a través del Pertús. El otro es el que conecta la factoría de Mercedes Benz en Manheim con la terminal barcelonesa de Can Tunis.
Además, con el inicio del nuevo año, Transfesa también a arrebatado a su segundo mayor accionista (Renfe posee el 10% de las acciones del operador privado) el tren de cereales que une Babilafuente (Salamanca) con Santander.