Renfe Integria ha entregado recientemente la locomotora histórica 289-015 a la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, y después de unas últimas pruebas de verificación en vía, se incorporará a la colección del Museo del Ferrocarril de Madrid. Podrá encargarse de tracción bajo catenaria de trenes históricos, como el Tren de la Navidad.
Vuelve la locomotora histórica 289-015
En el año 2010, Renfe Integria comenzó una serie de trabajos con el objetivo de incorporar la locomotora histórica 289-015 a la colección del Museo del Ferrocarril de Madrid. Terminados dichos trabajos, se están llevando a cabo verificaciones en vías y está previsto que en estas fiestas de Navidad se una a los coches Costa del museo para encargarse de la tracción del Tren de la Navidad.
A partir de ahora, la 289-015 podrá utilizarse para tracción como catenaria en los trenes históricos de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, y se empleará también en eventos de Adif y Renfe Operadora.
Según recoge Vía Libre, se ha logrado una “perfecta recuperación, que ha conseguido unas excelentes condiciones mecánicas y de seguridad“. Algunas de las intervenciones más importantes han sido la recuperación del tono original de la máquina en el taller de la máquina. También se ha podido rescatar la tipografía original de la numeración y los cinco colores de su librea.
En diciembre de 2004, la locomotora histórica 289-015 se apartó en Miranda de Ebro (Burgos), y en 2005 la Unidad de Negocio de Mercancías de Renfe aceptó cederla a la Fundación de los Ferrocarriles Españoles para el Museo del Ferrocarril de Madrid. La locomotora realizó su primer servicio para el museo el 31 de julio de 2005, cuando remolcó de Venta de Baños (Palencia) a Madrid una composición que poco antes había realizado el trayecto entre Frómista y Venta de Baños tirada por la “Verraco”.
Posteriormente (en las temporadas de 2007, 2008 y 2009), la 289-015 realizó sus funciones en el Tren de la Fresa y el Tren de la Navidad.
Esta locomotora forma parte de la serie 289 (la ex Renfe 8900), que contaba con cuarenta unidades recibidas en el periodo 1969-1972. Se optó por ellas tras los buenos resultados obtenidos con las antecesoras bitensión de la serie 279 (ex REnfe 7900). Las locomotoras de ambas series incorporaban una novedosa disposición de ejes tipo B’ B’: se trata de dos ejes motores acoplados mecánicamente en cada uno de los dos bogies. Además, en cada bogie monomotor se encuentra un motor de tracción tipo MB-3200-B que logra accionar los ejes mediante una transmisión birreductora.
Las locomotoras de la serie 289 pesan 84 toneladas, desarrollan unos 4.200 CV de potencia y cuentan con un freno dinámico eléctrico de tipo estático. En origen, dicho freno es de vacío, pero se equipa después con freno dual (freno de vacío y freno por aire comprimido). El caso de las cuatro últimas locomotoras de la serie 289 es un poco distinto, ya que contaban con freno dual incorporado de fábrica, lo que las convertía en las primeras locomotoras eléctricas de Renfe en traer en origen dicho freno dual.
La última máquina de la serie que prestó servicio –la 289.030.0– fue dada de baja en el mes de mayo de 2010. En la actualidad se conservan aún dos locomotoras de este tipo: la 289.020, en posesión de Asvafer (Asociación Vallisoletana de Amigos del Ferrocarril) y la mencionada 289.015.
Fuente: Vía Libre.