Renfe ha publicado su informe financiero del primer trimestre del año 2023, en el que ha obtenido un EBITDA claramente superior al del mismo periodo de 2022 gracias al aumento de los ingresos y la contención de los gastos.
En concreto, el grupo ha obtenido unos ingresos de 981,49 millones de euros, un incremento del 7% respecto al primer trimestre de 2022, en el que ingresó 917,05 millones de euros. El crecimiento ha venido impulsado por un aumento en el número de viajeros en todos los servicios y en las toneladas de mercancías transportadas.
Del total de ingresos, 901,28 millones corresponden a la operación de sus trenes. En los trenes OSP (Obligación de Servicio Público), la demanda ha aumentado en un 35% gracias, según la operadora, a los abonos recurrentes gratuitos.
Por su parte, en los servicios comerciales, a pesar de la creciente competencia, la demanda ha aumentado un 19,7%. En total, entre enero y marzo de 2023 Renfe ha transportado 128 millones de viajeros, 33 millones más que entre enero y marzo de 2022.
Los otros 80,21 millones de ingresos proceden de otros conceptos, como la explotación del Haramain, el tren de alta velocidad que une Medina y La Meca en Arabia Saudí.
A pesar de que los ingresos han aumentado un 7%, los gastos sólo lo han hecho en un 4%, pasando de los 916,51 millones del primer trimestre de 2022 a los 952,92 de los del primer trimestre de 2023.
Esta contención de gastos, facilitada por la reducción de los precios de la electricidad, ha permitido pasar de un EBITDA de 0,54 millones de euros a uno de 28,57 millones. Sin embargo, los 99,02 millones resultantes de amortizaciones, gastos fiscales y resultados financieros ha hecho que las pérdidas sean de 70,45 millones de euros; un 26,3% inferiores a las del mismo periodo de 2022, cuando Renfe perdió 95,6 millones.
Estas cifras confirman una tendencia al alza en los resultados de una operadora que compite en corredores más rentables con Ouigo e Iryo pero que, sin embargo, presta servicio en solitario en rutas deficitarias cuyas pérdidas antiguamente se compensaban con los ingresos obtenidos en las de alta demanda.
