El ministro francés de Transportes, Frédéric Cuvillier, ha presentado un proyecto de ley que prevé una reforma del sistema público ferroviario, en la que se incluye la fusión de SNCF y RFF (separadas desde el año 1997). De este modo, tanto las funciones de desarrollo y mantenimiento de la infraestructura como la de su explotación para el transporte quedarían integradas en una única empresa estatal, la nueva SNCF.
“Nueva” fusión de SNCF y RFF
La RFF (Réseau Ferré de France o “Red Ferroviaria de Fancia”) es una empresa del Estado francés encargada de la gestión y el desarrollo de la infraestructura ferroviaria en el país. Surgió en el año 1997 a partir de una escisión de la SNCF (Societé Nationale des Chemins de Fer Français).
Actualmente los ingresos principales de RFF tienen su origen en los cánones de explotación de la red ferroviaria, y el 90% de los mismos proceden directamente de la SNCF.
Con la reforma propuesta, RFF volvería a integrarse en un único grupo SNCF, que se subdividiría a su vez en dos grandes secciones: SNCF Réseau (para la gestión de la infraestructura ferroviaria) y SNCF Mobilités (para la explotación y el transporte).
Sin lugar a dudas, estas reformas en Francia contribuirán a un avivamiento del debate público en España, donde ya se alzan voces a favor de la integración de Renfe y Adif.
Los cinco principios de la reforma
La unión de SNCF y RFF se enmarca en el primero de los cinco pilares del proyecto de ley presentado por Cuvillier en Francia:
- Un verdadero grupo público industrial integrado.
- Un servicio público reforzado, mejor dirigido por el Estado y bajo el control de la nación.
- Un pacto nacional para asegurar el futuro del sistema público ferroviario.
- La construcción de un marco social común a todo el sector ferroviario y el mantenimiento del personal ferroviario.
- Un sistema ferroviario bajo el control regulador con competencias reforzadas.
En los próximos meses, el Parlamento francés examinará la propuesta de ley para realizar las enmiendas necesarias. Si dicho trabajo avanza al ritmo esperado, la ley se aprobaría en la primavera de 2014 y quedaría implementada por completo el 1 de enero de 2015.
Fuente del artículo: traducción propia de la nota de prensa de la SNCF.