La Comisión Europea ha adoptado el pasado 14 de diciembre una serie de medidas para modernizar el sistema de transporte de la Unión Europea. El objetivo es facilitar el cumplimiento del Pacto Verde Europeo, que establece una reducción de las emisiones contaminantes en el transporte del 90% hasta 2050.
Gran parte de estas medidas contemplan un impulso al ferrocarril; con iniciativas como mejorar las características de la RTE-T ferroviaria, facilitar el transporte de mercancías por ferrocarril o impulsar los viajes internacionales por ferrocarril.
Mejoras en la RTE-T
El primer paquete de medidas está relacionado con la Red Transeuropea de Transporte, conocida en inglés como la TEN-T. Es la principal apuesta de la Comisión Europea por crear una red única que facilite la movilidad interior de la Unión.
- Exige que las principales líneas ferroviarias de transporte de viajeros de la RTE-T permitan a los trenes circular a 160 km/h o a mayor velocidad de aquí a 2040. Además las vías fluviales deben garantizar unas buenas condiciones de navegación sin obstáculos durante un número determinado de días al año.
- En mercancías se deben crear más terminales de transbordo, mejorar la capacidad de tratamiento de las mercancías, reducir los tiempos de espera en las fronteras y aumentar la longitud de los trenes. Además se debe facilitar que los camiones puedan ser transportados en tren por toda la red. Para garantizar una correcta planificación de las infraestructuras se crean nueve «corredores europeos de transporte» que integran el ferrocarril, la carretera y las vías navegables.
- Introduce un nuevo plazo intermedio de 2040 para adelantar la finalización de las principales partes de la red antes del plazo final de 2050, que se aplica a la red en su conjunto. Para 2040 deberán completarse nuevas conexiones ferroviarias de alta velocidad entre Oporto y Vigo, y Budapest y Bucarest, entre otras.
- Exige a las 424 grandes ciudades de la red RTE-T que desarrollen planes de movilidad urbana sostenible para promover la movilidad sin emisiones y aumentar y mejorar el transporte público y las infraestructuras para los desplazamientos a pie y en bicicleta.
Aumento del tráfico transfronterizo de viajeros y mercancías
- Crear una propuesta legislativa sobre multimodalidad en 2022 para impulsar la expedición de billetes multimodales de fácil utilización.
- Crear un sistema que permita a los pasajeros encontrar los mejores billetes al precio más atractivo y dar mejor apoyo a los pasajeros que se enfrentan a afecciones al servicio. Así como el compromiso de explorar una posible exención del IVA para los billetes de tren a escala europea.
- Derogar de normas nacionales técnicas y operativas redundantes.
- Anunciar en 2022 propuestas sobre la fijación de horarios y la gestión de la capacidad. Lo que impulsará unos servicios ferroviarios transfronterizos más rápidos y frecuentes.
- Crear nuevas directrices para el cobro de cánones de acceso a infraestructuras ferroviarias en 2023. Que facilitarán el acceso de los operadores ferroviarios a las vías, aumentarán la competencia y harán que los precios de los billetes sean más atractivos para los pasajeros.
De aquí a 2030, la Comisión apoyará la puesta en marcha de al menos quince proyectos piloto transfronterizos para poner a prueba el enfoque del plan de acción, antes de la entrada en vigor de los nuevos requisitos de la RTE-T.
Movilidad Urbana
La Comisión Europea también quiere abordar la movilidad urbana, una gran generadora de emisiones contaminantes. En este ámbito se van a dar recomendaciones a las ciudades para mejorar la movilidad sostenible. Con el foco puesto en el transporte público y los desplazamientos en bicicleta y a pie.
Además se prioriza la migración a alternativas cero emisiones para las flotas de transporte urbano. Como los taxis, VTC, reparto de paquetería.
Durante 2022 la Comisión Europea propondrá una Recomendación a los Estados miembros de la UE para la elaboración de planes nacionales que ayuden a las ciudades a desarrollar sus planes de movilidad.