El Gobierno de Cataluña ha acordado esta mañana que desde 2024 las cercanías de Lérida pasarán a operarse por FGC. Dejando de esta forma de estar en manos de Renfe como hasta ahora. Una decisión que si bien ya había sido anunciada el año pasado, ha sido ratificada hoy.
La R-12 se dividirá en dos líneas
En concreto, el Gobierno autonómico prevé transformar el tramo del actual R-12 de Media Distancia que une Lérida con Cervera y Manresa en dos líneas de Cercanías. La primera de ellas es la RL-3, que unirá Lérida con Cervera. La segunda será la RL-4 que irá entre Lérida y Manresa.
El objetivo del gobierno catalán es duplicar el número de trenes diarios en cada uno de los recorridos. En la RL-1 se pasará de 6 a 12 trenes por sentido y día, mientras que en la RL-2 la frecuencia aumentará de 3 a 5 trenes por sentido y día. Una mejora con la que Cataluña busca aumentar la demanda un 55% en comparación con 2018. En concreto, estima que en 2026 entre Lérida y Manresa viajen 450.000 viajeros.
Jordi Puigneró, vicepresidente del Gobierno catalán y titular de Territorio; ha asegurado que FGC invertirá 44 millones de euros en adquirir material móvil de última generación. Presupuesto que aumentará a 65 millones para incluir el mantenimiento integral de los mismos.
Serán cuatro unidades eléctricas de 60 metros de longitud, de las cuales tres estarán en operación y la cuarta en reserva. Para este fin se va a construir una nueva central operativa de FGC en Lérida con talleres y depósito para el material móvil así como la contratación de nuevo personal para prestar el servicio.
El traspaso de las Cercanías de Lérida, primer paso para asumir todas las de Cataluña
El anuncio del traspaso se produce en medio de las negociaciones por traspasar a FGC el resto del servicio Rodalies de toda Cataluña. Negociaciones que fueron uno de los motivos por los que SEMAF convocó la huelga de maquinistas de septiembre y octubre ante la incertidumbre sobre el futuro del personal de conducción empleado por Renfe para estos trenes.
Puigneró ha explicado que con esta decisión FGC pasará a controlar el 10% de todos los trenes de la red de corta y media distancia. Y que el gobierno autonómico mantiene su voluntad de asumir el 100% con su empresa pública. Que, de cumplirse las demandas, también gestionaría la infraestructura empleada para estos servicios.
