El fabricante Stadler Rail Valencia ha sido elegido para fabricar 57 locomotoras diésel para KiwiRail, la empresa ferroviaria pública de Nueva Zelanda. Que empleará estas nuevas locomotoras para renovar su anticuado parque móvil y potenciar los trenes de mercancías en la isla Sur.
Stadler llega a Nueva Zelanda
El contrato, que tiene un valor aproximado de 228 millones de euros, es el primero que Stadler Rail consigue en Nueva Zelanda. Y podría ser complementado en un futuro con otros pedidos, ya que el fabricante y KiwRail han firmado un acuerdo marco mediante el que aumentar el número de locomotoras vendidas.
Las locomotoras, diseñadas específicamente para los requisitos de la red neozelandesa, tendrán disposición de ejes Co-Co, un ancho de vía de 1.067 mm y un generador diésel de 3.000 kW de potencia. Cada locomotora tendrá dos cabinas de conducción, diseñadas en colaboración con KiwiRail y cumplirán con la normativa de emisiones Euro V.
Las 57 locomotoras para KiwiRail aumentarán la eficiencia y la fiabilidad del servicio
En comparación con las 65 locomotoras actuales, que tienen una edad media de 47 años y algunas están cerca de cumplir 60 años de servicio, las 57 locomotoras para KiwiRail que se fabricarán en España permitirán reducir:
- 25% de las emisiones de NOx.
- 30% de las emisiones de partículas.
- Entre el 20% y el 25% de las emisiones de CO2.
Además las locomotoras serán más potentes que las actuales. Lo que permitirá a KiwiRail usar menos locomotoras para una misma composición que las que necesitan en la actualidad o bien operar trenes más largos y pesados.
Dispondrán de un sistema de autodiagnóstico que ofrecerá información sobre el estado de la locomotora con la que predecir futuras averías. Un sistema que junto a la juventud de las locomotoras permitirá aumentar la fiabilidad del transporte de mercancías en la isla Sur neozelandesa.
La previsión de KiwiRail es que las 57 locomotoras entren en servicio entre 2024 y 2026. Su llegada revitalizará el transporte de mercancías en una red que ha estado a punto de ser clausurada en 2015 tras un demoledor informe de Hacienda sobre su rentabilidad.
Esta es la segunda vez que KiwiRail compra material móvil fabricado en España. En 2011 la empresa adjudicó a CAF la fabricación de 57 unidades eléctricas de 3 coches. Que terminaron de recibirse en 2015 en una ceremonia presidida por el Primer Ministro.
