- Los proyectos de AVE (3.626 millones de euros) suponen el 62,3% de la inversión en obra pública en 2015.
- La red convencional también mejora su situación con una inyección de 373 millones.
- Renfe también invertirá, sobre todo en la renovación de flota.
El plan de inaugurar 1.000 km más de AVE en 2015 sitúa a la alta velocidad como motor de la obra pública en este ejercicio.
El tren es el protagonista de la obra pública
En este año (electoral, cabe mencionar) la red de alta velocidad se expandirá con la apertura de 8 nuevos tramos principales y otros complementarios que afectarán a hasta 27 conexiones entre capitales.
Si los plazos se mantienen, las inauguraciones comenzarán a finales de marzo con la apertura del tramo Valladolid-Palencia-León y también el de Olmedo-Zamora. Después, en verano, deberían inaugurarse las secciones Antequera-Granada, Monforte del Cid-Murcia y la conexión entre León y Asturias a través de la famosa variante de Pajares.
También está prevista la apertura de varios tramos del Eje atlántico, aunque no todos ellos en alta velocidad.
Por otra parte, también Renfe va a aumentar su inversión y volverá a comprar trenes, algo que no hacía en los últimos años. Si se trata de una decisión orientada a la renovación o es una suerte de preparación ante la liberalización del corredor del Levante, esto ya no queda claro.
Una crisis que cambió los esquemas del AVE
Sin embargo, estas nuevas inauguraciones llegan con un gran pero y es que, tras años de inversiones en alta velocidad con una cuestionable rentabilidad, ahora se imponen las obras más austeras. Es por eso que algunos de estos nuevos tramos llegarán de forma diferente a como estaban diseñadas inicialmente, ya sea con una sola vía, sin soterramiento a la entrada de la ciudad o con estaciones mucho más económicas.
Fuente: El Mundo.