El próximo lunes empieza la XXI Conferencia Internacional sobre Cambio Climático (COP21) con las esperanzas de muchos puestas en que marque un hito en la lucha contra el cambio climático. El objetivo que se espera alcanzar en la Cumbre de París es conseguir un compromiso voluntario y vinculante con el cual se pueda limitar el aumento de la temperatura global a menos de 2ºC en 2100. El ferrocarril, como medio de transporte terrestre más eficiente y sostenible, puede jugar un papel importante para alcanzar esta meta.
Cabe indicar que la diferencia entre los compromisos de la COP21 y los adquiridos con el Protocolo de Kioto es que cada nación es libre de decidir a lo que se compromete dentro de sus capacidades y que, en un principio, no existirán sanciones para aquellos que lo incumplan. Otra novedad de la cumbre es que, por primera vez, que se tratará seriamente el problema del transporte. Origina gran parte de las emisiones globales de GEI (Gases de Efecto Invernadero) y hasta ahora ha sido un gran olvidado en las cumbres por el clima. Esto dará, por fin, la oportunidad al ferrocarril en todas sus modalidades de mostrar que es el mejor aliado para la lucha contra el cambio climático en el sector transportes.
El sector transportes en la Cumbre de París
El transporte causa en torno al 26% de las emisiones globales de CO2 a la atmósfera y en la Unión Europea se trata del segundo mayor emisor de GEI.
Pero no solo está el problema de las emisiones, este sector genera también otras externalidades negativas como son la contaminación acústica, malos olores, congestión, impactos en el paisaje, etc. Por eso, quizá sorprenda todavía más que el transporte no se haya tratado a fondo en ninguna cumbre hasta el momento.
Hasta ahora ha ido quedando bastante claro que las políticas ambientales que se han aplicado a este sector han sido ineficientes para alcanzar los objetivos de emisiones tanto para 2020 como 2030. De hecho, las emisiones del transporte no han hecho más que aumentar, al igual que ha aumentado el número de mercancías y pasajeros que se desplazan. Ha sido esta la principal razón por la que en los debates preparatorios del COP21 las reducciones de GEI en el transporte han estado muy presentes.
El ferrocarril como pieza clave en el COP21
El ferrocarril debe jugar un importante rol en la lucha contra el cambio climático. Muchos se han dado cuenta de ello; por ejemplo, La India ha preparado un programa para la Cumbre de París centrado en las mejoras de las tecnologías del ferrocarril (uso de energía solar, bio-aseos, conservación y ahorro de agua, etc.) como medio sostenible. Para promocionar este tipo de programas y favorecer el uso del tren durante la COP21 se han organizado múltiples eventos y conferencias.
EcoPassenger
EcoPassenger es una herramienta online, creada con motivo del COP21, mediante la cual se puede calcular y comparar la energía consumida, las emisiones de CO2 y otros impactos ambientales de varios medios de transporte.
Train to Paris
El tren como medio sostenible para llegar a la Cumbre de París, eso es lo que promueve Train to Paris. Con esta iniciativa se han sincronizado los horarios de los diversos ferrocarriles para poder llegar cómodamente en tren a la cumbre desde distintos puntos de Europa y Asia.
Transport Day
El día 6 de diciembre la cumbre estará dedicada enteramente al transporte. Expertos de todo el mundo debatirán acerca de las implicaciones de transporte y el medio ambiente, cómo debe cambiar el transporte para bajar las emisiones y los pasos a seguir tras la Cumbre de París.
Otras charlas y conferencias
UIC, UNIFE e ITF, entre otros, organizan diferentes conferencias durante las dos semanas de duración de la Cumbre, en las que el tren estará muy presente. Se abordarán temas como la reducción de energías fósiles, el empleo de energías renovables, la necesidad del transporte público para la movilidad urbana o el uso del ferrocarril como medio de transporte sostenible.
Tras la Cumbre de París
Tras el chasco que se produjo ante la falta de consenso en la Cumbre de Copenhague de 2009, todo el mundo espera que se llegue a acuerdos importantes en el COP21. Aunque si esto no ocurre, no significa que la lucha contra el cambio climático esté acabada. Nunca hay que perder la esperanza, aún con los ejemplares que dirigen el mundo y de los que supuestamente dependemos.
Sin embargo, es cierto que la ONU podría ver gravemente perjudicada su imagen si no se alcanza un acuerdo global ante un problema de tal magnitud por lo que es prácticamente seguro que se pondrán las pilas. Además, el cambio climático forzado por el ser humano es un problema que tarde o temprano habrá que afrontar… Y más vale que sea temprano.
Seamos optimistas, con acuerdos o sin ellos, la mayor parte de los países participantes presentarán programas que están dispuestos a cumplir. Y, lo más probable, es que el ferrocarril salga triunfante de la Cumbre de París como la piedra angular del transporte en la lucha contra el cambio climático.
